Josep Maria Parrado, la fuerza impulsora detrás de Cañete, mantiene una fotografía de su padre y su abuelo en su escritorio, vestidos con impecables uniformes blancos, ambos camareros profesionales de carrera que inspiraron a Josep (los uniformes rinden un homenaje directo) la creación de Cañete, que se ha consolidado a lo largo de los últimos 18 meses ofreciendo una cocina tradicional andaluza combinada con modernas técnicas catalanas e ingredientes locales. Josep Maria Masó es el chef residente y director culinario. Original de Sevilla Josep recuerda la frustración de su madre al no ser capaz de reproducir el sabor de la fritura de Andalucía aquí en la capital catalana. "La razón es porque la harina es una variedad completamente diferente, en el sur la harina se deriva de los garbanzos y la temperatura del aceite, así como la variedad también es clave."

La influencia arabe y del norte de África sigue siendo evidente en la variedad y riqueza de las tapas y raciones que se sirven actualmente en Andalucía (donde se originaron las tapas según algunos), este enfoque social del acto de comer en compañia es muy popular allí, dado que fue ocupada durante ocho siglos, es comprensible que esta herencia siga viva en las costumbres y los alimentos. Andalucía está compuesta de 8 provincias, 5 de las cuales se encuentran en la costa por lo que la importancia de pescados y mariscos en la economía y la cocina loca  es un factor importante. Tradicionalmente los barcos más pequeños se quedaban más cerca de la costa y pescaban los peces más pequeños; por eso esa elección de la fritura, boquerones, chipirones, etc.

A pesar de la enorme afluencia de inmigrantes andaluces a Barcelona durante los años 50 y 60,  su influencia se limitaba  a la periferia de Barcelona y a los barrios obreros como el de Santa Coloma y Badalona, donde entrar en un bar local es sentirte transportado a una región española diferente. Cañete es un esfuerzo consciente para traer la tradición andaluza, la elegancia y un restaurante de primera clase al barrio del Raval. El padre de Josep solia decir que se puede saber mucho sobre la gente viendo la forma en que comen, el camarero detrás del mostrador goza de una perspectiva privilegiada y un contacto con todos los estratos de la sociedad. Desde la reserva inicial al servicio de camareros, del diseño interior a la presentación de los cuadros (a lo largo de la barra del bar) Cañete no ofrece solo el sabor, sino el ambiente del sur de España, pero sin perder de vista la comida.

Cañete. C. de la Unió, 17.  T. 93 002 94 25

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