Suzie siguió con su marca de ropa Vampire’s Wife, y Nick editó uno de los mejores álbumes de su larga carrera: el fúnebre (por supuesto) “Skeleton Tree” (2016), que fue acompañado por el documental  “One more time with feeling”, donde los Cave hablaban de la tragedia y la banda interpretaba el disco nuevo en su totalidad, bajo una fotografía 3D en blanco y negro. La película también servía para presentar el disco a sus fans, porque el artista aún no se encontraba en condiciones de volver a los escenarios, pero en el 2017 se embarcó en una nueva gira mundial junto a los Bad Seeds, y nuevamente la crítica se rindió a sus pies: a sus 60 años de edad el australiano sigue siendo un artista descomunal capaz de sacar oro del sufrimiento y de convertir cada uno de sus conciertos en una catarsis colectiva, liderada por este animal de escena que es una de las pocas rockstars de los 80 que nos queda en activo, capaz de seguir generando material actual a la altura de sus creaciones más míticas. Y cuando viene un artista de este calado, es fundamental tratar de volver a verlo en su hábitat natural: un show en directo.

Nick Cave se presentará el jueves 31 de mayo en el Primavera Sound, y el 12 de abril estrenará un nuevo documental sobre la gira que se llama “Distant Sky, Live in Copenhagen”, su tercer documental en 4 años.