b-seen Música
Evripidis Sabatis
& his tragedies
Ya un viejo conocido del underground barcelonés, el griego Evripidis Sabatis y su banda Evripidis and his Tragedies acaban de editar un exquisito EP de cuatro temas en vinilo y un excelente vídeo clip, Just a Kleenex, que se financiaron con el hoy muy en boga proceso de “crowdfunding” que consiste en pedir colaboraciones monetarias a amigos y fans vía Internet. Charlamos con él en un moderno bar del barrio de Sant Antoni para que nos cuente cómo fue la creación de éstas últimas producciones y del estado actual de su proyecto artístico.
Antes de comenzar la entrevista, nos comentabas que ya estabas harto de contar siempre la misma historia sobre como llegaste y te instalaste en Barcelona, pero siendo esta tu primera vez en B-Guided y suponiendo que eres una figura nueva para muchos de nuestros lectores, te voy a pedir que hagas el esfuerzo de volver a contar esa historia para nosotros.
Me vine a Barcelona vía Grecia después de vivir una temporada en Londres, y me sentía deprimido, estancado y sin estímulos en Atenas, no sabía que hacer con mi vida. Tenía entonces un novio que era griego también y se vino a vivir a Barcelona y me decía: “Te va a encantar aquí, es muy pop, los españoles son encantadores, hay muchos sitios y bares con la música que te gusta”. Yo ya conocía algo de lo que se hace aquí en música, como por ejemplo el catálogo del sello Elefant Records, y mi mejor amiga de Grecia también me decía que quería venirse a vivir a España, miramos algunas escuelas de ilustración en Madrid, pero al final nos terminamos decantando por Barcelona. Empezamos un posgrado, terminamos el posgrado. Me puse de novio aquí, no encontraba trabajo, dejé al novio y justo encontré un trabajo. Supe que no iba a volver, me establecí y empecé tocar en bares, primero tocando el piano solo, que en aquel entonces se había puesto de moda Rufus Wainwright y estaba el clima como para este tipo de cantautor. La propuesta gustó y empezó a armarse ruido alrededor de mi nombre, hice un concierto en el Razzmatazz y me sugirieron que armara una banda para vestir a las canciones, algo así como un solista con invitados, pero invitados que opinan y tienen mucha importancia en el proyecto, invitados de una vida entera. Así ya he tocado en el Primavera Sound, en el BAM y en cuanto local existe, creo. Trabajo con gente que son mis amigos, que creen en el grupo y que yo creo en ellos. Lo que ha cambiado es que antes quería una formación más grande, llegamos a ser hasta más de 8, ahora prefiero trabajar con solo 4 o 5, que apuesten por algo más sólido. Una banda más grande ya no es un formato para una España en tiempos de crisis. También es complejo para conseguir sitio para ensayar, para enseñar las canciones, asi que estoy muy cómodo con la formación reducida de ahora.
Igual veo que en tu nuevo EP hay una buena cantidad de invitados…
El single tiene un montón de invitados porque sigue la línea de el disco anterior que era muy big band. Ahora estoy mezclando un nuevo LP que ya está grabado, aunque aún no tengo fecha de edición. Te diría que más que promocionar el single, me interesa promocionar el proyecto completo, de todo lo que yo hago, pero bueno, ésta producción tiene como curiosidad que contiene duetos con Marc y Laura de Doble Pletina, grupo que además de ser amigos personales admiro mucho, siempre cantábamos informalmente y ahora ha quedado registrado. Son mis compañeros de canto en el disco y tienen un papel coprotagónico.
El single y el vídeo fueron financiados por “crowfunding” en Internet, cuéntanos un poco de cómo fue ese proceso.
Fueron amigos, o internautas que se esforzaron y pusieron lo que pudieron, nos ayudaron a plasmar el asunto y fue un apoyo importante a nivel moral y material que nos dejó muchas sorpresas muy agradables. Fue bonito. Después hubo singles autografiados y con dibujos para los que colaboraron. Por otro lado hubo un costado más feo que es que odio pedir dinero, y que a veces el hecho de registrarte en una página para colaborar es complicado y engorroso y eso quizás hace que mucha gente se eche para atrás a la hora de participar. Quizás vuelva a hacerlo, me parece un método válido, pero me resultó un poco incómodo también.
Igual en los papeles se lee bonito: gente solidaria que apuesta por el proyecto de un artista…
Si pero hay tantos problemas en el mundo… y pedir dinero para un videoclip se me termina haciendo un poco frívolo. Soy de Grecia, sé lo que significa estar en la pobreza.
Cuéntame de la gestación del vídeo…
Quisimos hacer algo con una estética de Nan Goldin o Larry Clark. Enseñar esa idea de juventud marginal que va un poco por “the wild side”. Quisimos mucha belleza. Quisimos una sensación como del imaginario de The Smiths, donde Morrissey se enamora de manera platónica de chicos con el pelo rapado, hay cementarios como en la canción “Cemetery gates” al que van estos chicos muy jóvenes casi skinheads, con esa relación ambigua que es una amistad sin algo sexual pero que podría haberlo, que uno está enamorado del otro pero que no termina de expresarlo…, y como la canción habla del amor de usar y tirar, y hablo de alguien que está muy enamorado y la otra persona no, esa unión que deja al enamorado vacío y que lo hace pensar que lo mejor que pudieron hacer fue follar y se compara a sí mismo con un kleenex…, y todo en el marco de una canción con un sonido muy pop. Hay ironía y dolor ahí, es sobre lo que no pudo ser.
A quién no le ha pasado algo así alguna vez?...
Es un amor sin respuesta, que al final obtiene algo pero es sólo un décimo de lo que esperabas, la única cosa que te queda en vez de amargarte es decir “bueno por lo menos hemos pasado un buen rato”, y de ahí viene el título del single, “… And it was good while it lasted, Baby!”
¿Y el disco nuevo que has grabado de que habla? ¿Tiene título?
Creo que se llamará “Futile games”, y habla de las cosas que siempre me importan a mi que son los amores, los amigos, los recuerdos y la muerte. Empieza con canciones de amor e ilusión, para llegar a canciones más amargas que te dejan en el suelo, que te recuerdan que las relaciones son unos juegos futiles, pero acaba diciendo que el amor sigue siendo la respuesta, incluso aunque siga siendo un juego futil, es el único antídoto contra la muerte.
Ahora estás por irte a EEUU a tocar?
Me he buscado unas fechas en New York, tocando con algunos otros grupos, y entre ellos hay músicos que participaron del “69 love songs” de The Magnetic Fields que es uno de mis discos favoritos de toda la vida, me hace muchísima ilusión. Va a ser una vuelta a mis orígenes: tocar en bares solo con un piano. En el fondo soy alguien que cuenta historias.
- "... And it was good while it Lasted, Baby! " is available on Spotify, as well as the whole back catalogue of Evripidis and His Tragedies. The record can be purchased at the band’s gigs.
- Fotografía; Laia Benavides