El elemento principal de la tienda - que ocupa un lugar en una esquina del mercado - es la 'fachada' de 14 m de largo que actúa como escaparate para el producto y espacio de trabajo para los empleados. La naturaleza orgánica y saludable de los productos en venta junto con el requisito de impecables condiciones higiénicas inspiraron los materiales utilizados para el diseño: madera, mármol, terrazo y vidrio. El letrero de colores sobre el soporte presenta motivos pintados en acuarela de los diversos comestibles que se venden allí. Alonso describe la resolución final como una colaboración cercana entre las Torres y sus propias habilidades de diseño, donde su propia predilección por la joyería es claramente visible en este proyecto simple y bellamente resuelto.